miércoles, 13 de abril de 2011

Maraton en Madrid

Más de 16.000 atletas, la gran mayoría de ellos populares, recorrerán el próximo domingo las calles de la capital, que desde las 9 de la mañana serán escenario tanto del 34 maraton de Madrid como de la segunda edición de la prueba "10K de Madrid", que se celebran simultáneamente.
Madrid vuelve a convertirse así este fin de semana en la gran fiesta del atletismo popular, una cita esperada todos los años por miles de aficionados a las carreras populares cuyo único objetivo es atravesar la meta, sin importarles demasiado el puesto de llegada.Al igual que ocurrió en la pasada edición, uno de los principales enemigos de los maratonianos volverá a ser este año el calor. Las previsiones meteorológicas para este domingo, óptimas para el paseo, no son tan buenas para afrontar los 42.195 metros de una carrera como el maratón, ya que se esperan temperaturas que rondarán los 25 grados centígrados.
MÁS DE 16.000 INSCRITOS
Según los últimos datos facilitados a Servimedia por la organización, la cifra de corredores y corredoras inscritos en ambas pruebas supera los 16.000. Los atletas que correrán el Maratón, la prueba reina del atletismo de fondo, serán más de 10.500, mientras que son 5.500 los corredores que participarán en los "10K de Madrid", prueba de 10 kilómetros que se desarrolla de forma complementaria al Maratón.

La IAAF adopta las nuevas reglas de verificación de sexo femenino

La Federación Internacional de Atletismo (IAAF) se convirtió ayer en el primer organismo deportivo mundial en adoptar las nuevas reglas de verificación de sexo para deportistas que el Comité Olímpico Internacional exigirá para los Juegos de Londres'2012. La nueva normativa, elaborada por un grupo de expertos de la IAAF y la Comisión Médica del COI, servirá para reglamentar la eligibilidad de mujeres con hiperandrogenismo (una anomalía genética que provoca exceso de producción de hormonas masculinas), cuyo caso más sonado fue el de la sudafricana Caster Semenya, vigente campeona del mundo de 800 metros. La decisión se tomó en la reunión del Consejo que se está celebrando en Daegu y entrará en vigor el próximo 1 de mayo.
La nueva normativa señala que una mujer con hiperandrogenismo que sea reconocida legalmente como mujer será elegible para competiciones atléticas femeninas siempre que tenga los niveles de andrógenos por debajo del rango masculino (medido en función de los niveles de testosterona en suero), o, si los tiene al mismo nivel, que su resistencia a los mismos no constituya ninguna ventaja competitiva.
Para revisar estos casos y decidir sobre la elegibilidad de las atletas con hiperandrogenismo, la IAAF designó unn grupo de expertos internacionales en medicina.

martes, 12 de abril de 2011

historia de el atletismo

La historia del atletismo puede ser tan antigua como la de la humanidad. Desde los tiempos primitivos, todo ser humano muestra una tendencia natural a poner a prueba sus recursos físicos. Pueden encontrarse huellas de las actividades atléticas en bajorrelieves egipcios que se remontan al año 3500 a.C., pero las primeras noticias documentadas de competiciones atléticas en la antigüedad se localizan en Grecia e Irlanda, siendo por tanto el atletismo la forma organizada de deporte más antigua.

En la literatura griega clásica se encuentran descripciones de carreras celebradas en la Hélade al menos mil años antes del nacimiento de la era cristiana, asociadas a fiestas religiosas. Aunque unos autores datan el origen de los Juegos Olímpicos, que recibían ese nombre por que se celebraban en la ciudad de Olimpia, al noroeste del Peloponeso, en el año 1222 a.C. y otros en el 884 a.C., el primer olimpionikós cuyo nombre conocemos es Coroebus, vencedor de la carrera de velocidad (stadion) en el año 776 a.C. Coroebus era un hijo de la tierra, pues procedía de la cercana Elis, la ciudad que promovía la celebración. Al principio la prueba del stadion era la única del programa. Más tarde se añadieron otras, como el diaulos (dos stadia), el dólico (cuya longitud oscilaba entre siete y veinticuatro stadia) y el pentatlón (que incluía la carrera del stadion, salto de longitud, disco, jabalina y lucha). Los vencedores recibían grandes honores, y algunas hazañas eran relatadas por famosos escritores y filósofos. De hecho, se conoce la mayor parte de los nombres de los antiguos campeones olímpicos gracias a las listas compiladas por celebridades como Hipias, Aristóteles y Escisión el Africano.

En el continente europeo el deporte sobrevivió gracias a los torneos caballerescos o militares y a deportes atléticos de unas características no muy alejadas de las que dominan en nuestros días comenzaron a desarrollarse en las islas Británicas. En el siglo XII la ciudad de Londres podía alardear de varios terrenos atléticos donde personas de diferentes clases ponían a prueba su destreza física en pruebas de carrera, salto y lanzamiento. En Escocia estos ejercicios atléticos desempeñaron un papel importante en las fiestas populares, que hasta cierto punto han perdurado hasta nuestros días, especialmente las pruebas de pesos.
Alrededor de la mitad del siglo XIX, se restauraron las competiciones de atletismo. Las pruebas se convirtieron en el deporte favorito de los ingleses y en 1834 un grupo de atletas de esta nacionalidad acordaron los mínimos exigibles para competir en determinadas pruebas. También en el siglo XIX se realizaron las primeras reuniones atléticas universitarias entre las universidades de Oxford y Cambridge (1864), el primer mitin nacional en Londres (1866) y el primer mitin amateur celebrado en Estados Unidos en pista cubierta.
El seguimiento del atletismo aumentó en Europa y América hasta que en 1896 se iniciaron en Atenas los Juegos Olímpicos de la era moderna, una modificación restaurada de los antiguos juegos que los griegos celebraban en Olímpia. Durante el siglo XX y lo que llevamos del XXI, los juegos se han celebrado en varios países a intervalos de cuatro años, excepto en tiempo de guerra. En 1913 se fundó la Federación Internacional de atletismo Amateur (IAAF), con sede central de Londres, con el fin de ser organismo rector de las competiciones de atletismo a escala internacional, estableciendo las reglas y dando oficialidad a los récords obtenidos por los atletas.